Fumadores sufren discriminación
Fumadores se sienten discriminados por las medidas y leyes antitabaco
Durante la última década, en diversos países del mundo se han implementado diversas medidas que restringen y discriminan abiertamente a los fumadores, las cuales han generado estados depresivos y sentimientos de rechazo y de minusvalía entre ellos. Efectivamente, en la actualidad vemos cómo se han aprobado diversas leyes, medidas, y prohibiciones en contra de las personas que tienen el hábito del tabaquismo, y tales medidas se aplican a rajatabla en establecimientos comerciales, restaurantes, hoteles, empresas, e incluso en la vía pública, provocando que las personas que tienen el hábito ó la costumbre de fumar se sientan discriminadas, e incluso provoque en ellas fuertes sentimientos de minusvalía, al sentirse relegados, rechazados, y discriminados, al hacerlos sentirse culpables, cómo si de seres inferiores se tratase.
Así es, en un mundo y una sociedad que se dice cada vez más abierta y "tolerante", y en la que mientras por una parte se han implementado medidas que favorecen a diversos colectivos ó minorías (cómo pueden ser los homosexuales, ó los farmacodependientes), por otra se han impuesto medidas que restringen y rechazan a los fumadores, y a la par que se hacen costosas campañas publicitarias en todos los medios de comunicación masiva para favorecer la aceptación y el no rechazo de tales minorías, en sentido contrario se han implementado costosas campañas publicitarias en todos los medios de información masiva, e incluso en escuelas y universidades, con el fin de conseguir que la sociedad rechace a los fumadores, y dicha circunstancia ha provocado que muchas personas que tienen el hábito del tabaco, se sientan rechazadas y estigmatizadas hasta el punto de provocarles severos cuadros depresivos.
Hoy en día en muchos países de Europa y de otros lugares del mundo, a los farmacodependientes ó adictos a las drogas duras, el Estado no sólo no les impone ninguna multa por su consumo, sino que incluso les provee gratuitamente la sustancia a la cual son adictos, mientras que el consumo del tabaquismo se multa, se castiga, y se penaliza, también es posible encontrar muchos establecimientos y hoteles con la leyenda "gay friendly", hoteles en los que dicha circunstancia lleva a que en ellos, en sus habitaciones y pasillos se organicen por las noches y madrugadas, ruidosas fiestas que hacen difícil conciliar el sueño, mientras que por el contrario, dichos hoteles y muchos más, tienen la leyenda "no fumadores", y eso mismo ocurre en bares, restaurantes, y cafés, con el pretexto de que el humo del tabaco contamina el ambiente y daña la salud, ante lo cual habría que preguntarse, si ya puestos a prohibir, ¿no habría que prohibir también la existencia de vehículos, motocicletas, camiones, y aviones que usen motores de combustión interna, ya que estos contaminan mucho más que el humo de un cigarrillo?, ¿y no habría que prohibir también las plantas termoeléctricas y cualquier fábrica que provoque humo ó vapores contaminantes, los cuales emiten por toneladas?
De cualquier manera, las medidas antitabaco han llegado más allá del ámbito de hoteles y lugares de esparcimiento, trasladándose incluso hasta el campo laboral en el que las empresas no contratan a personas que fumen, y en sus cuestionarios para la contratación de nuevos empleados, preguntan siempre si el candidato a empleado fuma ó no fuma, con el fin de no contratar a aquellos que fumen, generando con ello una clara y abierta discriminación hacia los fumadores, los cuales por otra parte, al igual que las personas que no fuman, pagan su consumo, y pagan impuestos, e incluso pagan impuestos adicionales muy elevados por el consumo de tabaco, financiando así de manera extraordinaria a las arcas del estado, pero a los que sin embargo se les prohíbe entrar en lugares que ellos financían de manera mayoritaria, y hasta en las calles y parques. Así que no es de extrañar que dicha situación de clara y evidente discriminación, esté provocando cuadros de angustia y de depresión entre los fumadores al sentirse de tal forma rechazados y discriminados.
Es cierto que sobre este tema puede escribirse mucho más, y analizarse más a fondo, pero por el momento considero suficiente dejarlo así, y si alguno de nuestros lectores es fumador y se ha sentido rechazado ó discriminado por las leyes y reglamentos antitabaco, esperemos que comente este tema y nos lo haga saber.
Así es, en un mundo y una sociedad que se dice cada vez más abierta y "tolerante", y en la que mientras por una parte se han implementado medidas que favorecen a diversos colectivos ó minorías (cómo pueden ser los homosexuales, ó los farmacodependientes), por otra se han impuesto medidas que restringen y rechazan a los fumadores, y a la par que se hacen costosas campañas publicitarias en todos los medios de comunicación masiva para favorecer la aceptación y el no rechazo de tales minorías, en sentido contrario se han implementado costosas campañas publicitarias en todos los medios de información masiva, e incluso en escuelas y universidades, con el fin de conseguir que la sociedad rechace a los fumadores, y dicha circunstancia ha provocado que muchas personas que tienen el hábito del tabaco, se sientan rechazadas y estigmatizadas hasta el punto de provocarles severos cuadros depresivos.
Hoy en día en muchos países de Europa y de otros lugares del mundo, a los farmacodependientes ó adictos a las drogas duras, el Estado no sólo no les impone ninguna multa por su consumo, sino que incluso les provee gratuitamente la sustancia a la cual son adictos, mientras que el consumo del tabaquismo se multa, se castiga, y se penaliza, también es posible encontrar muchos establecimientos y hoteles con la leyenda "gay friendly", hoteles en los que dicha circunstancia lleva a que en ellos, en sus habitaciones y pasillos se organicen por las noches y madrugadas, ruidosas fiestas que hacen difícil conciliar el sueño, mientras que por el contrario, dichos hoteles y muchos más, tienen la leyenda "no fumadores", y eso mismo ocurre en bares, restaurantes, y cafés, con el pretexto de que el humo del tabaco contamina el ambiente y daña la salud, ante lo cual habría que preguntarse, si ya puestos a prohibir, ¿no habría que prohibir también la existencia de vehículos, motocicletas, camiones, y aviones que usen motores de combustión interna, ya que estos contaminan mucho más que el humo de un cigarrillo?, ¿y no habría que prohibir también las plantas termoeléctricas y cualquier fábrica que provoque humo ó vapores contaminantes, los cuales emiten por toneladas?
De cualquier manera, las medidas antitabaco han llegado más allá del ámbito de hoteles y lugares de esparcimiento, trasladándose incluso hasta el campo laboral en el que las empresas no contratan a personas que fumen, y en sus cuestionarios para la contratación de nuevos empleados, preguntan siempre si el candidato a empleado fuma ó no fuma, con el fin de no contratar a aquellos que fumen, generando con ello una clara y abierta discriminación hacia los fumadores, los cuales por otra parte, al igual que las personas que no fuman, pagan su consumo, y pagan impuestos, e incluso pagan impuestos adicionales muy elevados por el consumo de tabaco, financiando así de manera extraordinaria a las arcas del estado, pero a los que sin embargo se les prohíbe entrar en lugares que ellos financían de manera mayoritaria, y hasta en las calles y parques. Así que no es de extrañar que dicha situación de clara y evidente discriminación, esté provocando cuadros de angustia y de depresión entre los fumadores al sentirse de tal forma rechazados y discriminados.
Es cierto que sobre este tema puede escribirse mucho más, y analizarse más a fondo, pero por el momento considero suficiente dejarlo así, y si alguno de nuestros lectores es fumador y se ha sentido rechazado ó discriminado por las leyes y reglamentos antitabaco, esperemos que comente este tema y nos lo haga saber.